Sobremordida

Sobremordida (Glosario BQDC)
Coinsol Dental - Dr. Enrique Solano

Escrito por:

Dr. Enrique Solano

Coinsol Dental

Con el término sobremordida, expresamos el grado de cobertura vertical que los incisivos superiores realizan sobre los inferiores, siendo la normal que en dentición adulta el incisivo superior cubra un tercio de la corona del inferior.

El grado de sobremordida puede ir desde una relación vertical aumentada o de mordida profunda a una disminuida o ausente como la mordida abierta, pasando por una relación borde a borde.

Este grado de entrecruzamiento de los incisivos, puede ser de origen dentario u óseo, siendo este el más grave y difícil de solucionar.

En términos generales el tipo de sobremordida, se corresponde con el patrón óseo y muscular del individuo. Ante un crecimiento más horizontal de los maxilares y una mayor competencia muscular, el tipo de sobremordida será más profunda y por el contrario un crecimiento más vertical de las estructuras esqueletales y menor tono muscular, la mordida tenderá a una mordida abierta.

Sobremordida aumentada

Se da cuando los incisivos superiores cubren más de un tercio de la corona de los inferiores, pudiendo llegar a una sobremordida mucho más profunda donde los incisivos inferiores pueden ser tapados en su totalidad y los incisivos superiores pueden lesionar las encías de los inferiores y estos a su vez pueden también tocar por palatino la de los superiores (mordida en garra).

En los casos de mordida profunda se producen también otros cambios adaptativos como, un volcamiento hacia palatino de los incisivos superiores que con esta posición bloquearan a la mandíbula dejándola en una relación más distal o retruida respecto al maxilar, la presencia de apiñamiento por la constricción en el sector anterior mandibular y la presencia de sonrisa gingival al haber bajado el nivel de apoyo labial. Siendo esta alta competencia labial y el patrón de crecimiento horizontal o incluso convergente de los maxilares, los factores etiológicos de este tipo de maloclusión, tipificada como Clase II división 2ª.

Figura de una sobremordida aumentada y tratamiento
Figura de una sobremordida aumentada y tratamiento

Es frecuente que estos individuos padezcan un mayor grado de gingivitis al quedar expuesta la encía en la línea de sonrisa, presentando también desgastes dentarios por el sobreapretamiento y a veces el rechinar de los dientes.

Aunque esta mordida profunda es típica de las clases II división 2ª caracterizada por una ausencia de resalte, también puede aparecer en otro tipo de maloclusiones como la clase II división 1ª con supraoclusión, donde sí hay resalte, debido fundamentalmente a una posición retruida madibular y una vestibulización de los incisivos superiores. En estos casos el patrón de crecimiento del individuo es horizontal y el nivel de competencia muscular bueno.

Figura de una clase II/ 1ª con sobremordida y tratamiento
Figura de una clase II/ 1ª con sobremordida y tratamiento

Ambas maloclusiones de clase II tienen en común una disposición mandibular con un patrón de crecimiento horizontal, con la diferencia de que en los casos de división 2ª, la mandíbula está atrapada por el maxilar y antes de ser estimulada para su crecimiento se ha de convertir en una división 1ª, es decir los incisivos han de ser vestibulizados, borrando con ello su inclinación palatina y creando un resalte al igual que en la división 1ª. Este resalte nos permitirá avanzar la mandíbula a una  relación borde a borde como hacen los aparatos funcionales corrigiendo de esta forma el resalte y la sobremordida. Este mismo efecto puede conseguirse con otro tipo de aparatos que tienen una mejor respuesta dentaria que esqueletal.

Tal como habíamos dicho al principio el problema dentario es más fácil de solucionar, pero el óseo va a depender de la edad del paciente y de su grado de severidad. De ahí la importancia de diagnosticarlo de forma temprana. En un paciente en crecimiento, podemos realizar correcciones ortopédicas, mientras que en una edad adulta, tan solo podemos compensarlo a través de los dientes cuando ello es factible o tener que acudir a la cirugía ortognática para los casos más severos.

Figura de una clase II/2º y tratamiento con cirugía ortognática
Figura de una clase II/2º y tratamiento con cirugía ortognática

Ausencia de sobremordida o mordida abierta

Ausencia de sobremordida o Mordida abierta, es la falta evidente de contacto entre los incisivos superiores e inferiores con presencia de una apertura en el cierre oclusal.

El patrón óseo y muscular de estos individuos es el opuesto al de la mordida profunda, es decir, crecimiento vertical y musculatura hipotónica, laxa o débil e incompetente.

La mordida abierta puede localizarse en diferentes sectores de la arcada y aquí tan solo nos referiremos a las que suceden en el sector anterior o incisivo. Pudiendo ser esta de mayor o menor intensidad y con origen diferente, dentario, esqueletal o mixto.

Las causas que la originan, pueden ser variadas desde una patología dental como hipoplasias del esmalte o amelogénesis imperfecta, hasta causas óseas como en determinados síndromes o incluso fisuras labiopalatinas con déficit del desarrollo maxilar.

Figura de Mordida Abierta Esqueletal y Tratamiento
Figura de Mordida Abierta Esqueletal y Tratamiento

Pero lo que más frecuentemente las provoca es la presencia de hábitos o anomalías funcionales a temprana edad como, hábitos de succión del pulgar que provocará una falta de erupción y una apertura entre los dientes por la interposición del dedo o el chupete. Dentro de las anomalías funcionales, serán la Deglución Inmadura y la Respiración bucal, las que afecten fundamentalmente al desarrollo del maxilar, La deglución inmadura por persistir una deglución infantil donde la lengua no ocupa su posición fisiológica ni cumple su función de dar forma al paladar, por adquirir esta una posición baja y proyectada ente los incisivos abriendo la mordida. Respiración oral, al respirar por la boca y no neumatizar los senos maxilares al no usar la vía nasal, impidiendo de esta forma el desarrollo transversal del maxilar, permitiendo que este se estreche y rote en sentido antihorario, mientras la mandíbula lo hace en sentido opuesto abriendo la mordida.

Ambas anomalías funcionales producen una falta de sellado labial e incompetencia muscular, induciendo a un patrón de crecimiento vertical que se puede ver agravado si el individuo a heredado un patrón morfogenético vertical.

Figura de Mordida Abierta dentaria por habito de succión del pulgar
Figura de Mordida Abierta dentaria por habito de succión del pulgar

La mordida abierta por lo tanto debe ser tratada tanto:

  • De forma preventiva, evitando malos hábitos y reforzando las funciones deglutoria y respiratoria.
  • De forma interceptiva, reeducándolas o resolviendo las obstrucciones respiratorias por rinitis.
  • De forma correctiva, mediante la intervención de las amígdalas y vegetaciones.

A nivel ortodóncico son muchos los aparatos y procedimientos que se pueden emplear, desde aparatos funcionales, brackets o incluso anclajes óseos mediante tornillos o mini placas que permitan la corrección de la separación de ambos planos oclusales haciéndoles converger ente sí. En los casos en los que el problema es muy severo a nivel esqueletal la única solución será la cirugía ortognática para cerrar la mordida abierta.

Mordida abierta tratamiento quirúrgico