Comienza el frío y con él la temporada de esquí se acerca. Seguro que los amantes a este deporte habrán comenzado a organizar ropa de esquí, botas, esquíes, etc. Sin embargo debemos saber que la práctica de este deporte implica una serie de riesgos que hemos de tener en cuenta y que por ello deberemos protegernos para evitar posibles lesiones.
Cada vez más, los esquiadores tienen más conciencia que llevar protecciones durante la práctica del esquí minimizará posibles traumatismos o fracturas tras un posible accidente. El uso del casco está cada día más presente en los que practican este deporte e incluso algunas estaciones de esquí tienen previsto establecerlo como de uso obligatorio para poder esquiar.
Sin embargo la Sociedad Catalano-Balear de Cirugía Maxilofacial establece que lo ideal para conseguir una protección adecuada sería la de usar un casco integral que nos protegiera boca y mandíbula. Estos cascos ya se usan en competiciones oficiales por parte de esquiadores profesionales debido a las velocidades que se alcanzan. Un accidente a dichas velocidades podría dejar graves secuelas si no se adoptaran las medidas de protección adecuadas.
La mejora y evolución de esquíes y tablas de snowboard hacen que se alcancen mayores velocidades en aficionados a este deporte, por lo que, cada vez más, se ven lesiones en la cabeza entre los practicantes.
Además del uso del casco, los protectores bucales tambíen contribuirían, al igual que en otros deportes, a reducir lesiones no sólo en los dientes, si no también en huesos faciales.
Como siempre indicamos la prevención en la salud oral como en el deporte hará que nuestra salud se conserve en las mejores condiciones posibles
