El trastorno en la articulación temporomandibular (ATM) se presenta cuando la «bisagra» que conecta el maxilar superior y la mandíbula no hace su función correctamente y no encaja de manera efectiva.
Esta articulación es una de las más complejas del cuerpo humano y entre sus funciones están la de abrir y mover la mandíbula inferior a un lado y a otro además de hacerlo hacia delante y atrás.
Todos los problemas que impidan que estos movimientos se realicen de manera correcta y que puedan afectar a músculos, ligamentos, discos o huesos se denomina trastorno en la articulación temporomandibular.
A menudo este trastorno va asociado un «salto» o chasquido en la mandíbula o incluso la sensación de que la mandíbula se queda encajada.
Los síntomas o señales que determinan este trastorno son varios, aunque en muchas ocasiones es difícil saber si realmente se trata de una alteración de la ATM ya que dichos síntomas pueden ser tambien indicadores de otros problemas.
A menudo esta alteración se presenta de las siguientes maneras:
1- Dolores de cabeza, parecidos a los de la migraña, que van acompañados de dolor en el oído o debajo de los ojos.
2- Chasquido al abrir y cerrar la boca.
3- Dolor al bostezar o incluso al masticar.
4- Molestias en la musculatura de la mandíbula.
5- Un cambio en la mordida y en la forma de «encajar» los dientes superiores con los inferiores.
El tratamiento de esta alteración es complejo y requiere un buen diagnóstico ya que, como hemos indicado, puede deberse o estar relacionado con muchos factores. Algunas sugerencias son:
1- Tomar analgésicos, miorrelajantes, aplicar calor húmedo cuando aparezcan episodios de espasmos musculares.
2- Usar férula de descarga para evitar la contracción muscular articular y el desgaste de los dientes por apretamiento.
3- Técnicas de relajación en caso de que el estrés haga que tengamos continuamente en tensión la zona.
4- En casos más avanzados podríamos recurrir a la cirugía.
En cualquier caso, ninguna de estas medidas se ha de tomar sin el previo diagnóstico del especialista.