Escrito por:
Dra. María Nart Molina
Nart Clínica Dental
¿Qué es un retenedor dental?
El retenedor es el aparato personalizado de ortodoncia pasivo que usamos para mantener los dientes en una determinada posición, la ideal alcanzada al finalizar el tratamiento de ortodoncia activa.
La fase de retención o mantenimiento es la más importante, ya que nos permitirá mantener los dientes en la posición que tanto deseábamos, por la que hemos invertido tiempo y dinero. Si no logramos cumplir bien con esta fase los dientes volverán a su posición original ya que se mueven toda la vida y tienen “memoria”.
La retención únicamente pospone la recidiva, el movimiento de los dientes hacia dónde estaban originalmente. Por lo tanto, sólo mantendremos estabilidad a largo plazo si cumplimos con la retención continua.
¿Porqué se mueven los dientes?
Los dientes se mueven porque están formados por tejidos vivos y rodeados de ellos. Los huesos maxilares están sometidos a continua modificación o recambio celular y las fibras periodontales y fuerzas oclusales, junto a los músculos periorales, ejercen presiones que contribuyen al cambio constante de posición.
La longitud y anchura del arco mandibular disminuyen con el tiempo, lo que hace que los incisivos inferiores sean los menos estables con el paso de los años o los que más recidivan, es decir, vuelvan a su posición.
¿Cuánto tiempo tengo que llevar los retenedores para que no se me muevan los dientes?
Desde la primera visita informamos de la importancia de la retención de por vida. Antes se decía que la retención se tenía que llevar el doble del tiempo de tratamiento o unos dos años.
Hoy en día, ya sabemos con evidencia científica que se tienen que llevar toda la vida; suele usarse por las noches y no necesariamente todos los días de la semana, pero si a modo recordatorio. Cuanto más se usen en la rutina diaria mejor, ya que además de evitar la recidiva protegerán también del desgaste dental.
Cuando no se utilizan durante unos días, se puede notar, sobre todo al principio, que cuesta encajar el retenedor o sentir presión. Esto se debe al pequeño desplazamiento que han sufrido los dientes en ese espacio de tiempo.
Los dos primeros años post tratamiento son lo más susceptibles a sufrir movimiento dental o recidiva y, aunque siempre vayan a producirse pequeños desplazamientos a lo largo de la vida, la única manera de evitar que vuelvan a su posición original es la utilización de retenedores dentales.
Si el paciente no piensa en llevar a cabo este mantenimiento de por vida aconsejamos que no inicie ningún tratamiento ya que habrá sido una pérdida de su tiempo, del nuestro y mala inversión económica.
¿Qué tipos de retenedores dentales existen? ¿Cuál es el más indicado?
Existen retenedores fijos y removibles, dependiendo de la clínica dental en la que se haga el tratamiento y de cómo sea este, el ortodoncista elegirá la opción más adecuada. Dada la importancia de esta fase es imprescindible asegurarse de que el paciente hace siempre un uso eficiente de su retención.
Los retenedores fijos se colocan en la cara interior de los dientes anteriores de canino a canino, tanto superiores como inferiores. El problema es que esto dificulta la higiene, por lo que no siempre está indicado dejarlo un periodo largo de tiempo. Además, otro inconveniente de los retenedores fijos dentales es, que según las fuerzas oclusales y los contactos con los dientes antagonistas, podrían descementarse en algún momento y entonces dejar de hacer su función.
Por esta razón, también se entrega el retenedor removible, una funda transparente fina de uso nocturno, essix; la cual se extiende hasta el final de la arcada manteniendo en posición los dientes posteriores. En el caso de que el paciente sea bruxista se puede confeccionar una férula de descarga.
No obstante, se debe individualizar el tipo de retención para cada paciente, que dependerá de qué maloclusión tenía al iniciar el tratamiento, los movimientos ortodónticos que se hayan realizado para corregirla y la anatomía de la corono clínica.
Existen otros retenedores, muy útiles también, aunque están cayendo en desuso hoy en día, ya que la comodidad y la estética del paciente priman. El Hawley y el Wrap son muy válidos en el caso de haber realizado expansiones o extracciones.
Estos retenedores dentales están hechos con resinas acrílicas y metal, lo que hace que tengan una estructura rígida para mantener la dimensión transversal, en el caso de Hawley. El Wrap contiene un arco de metal por toda la superficie de los dientes por fuera y evita que se abran los espacios de extracción, permitiendo incluso cerrar los espacios existentes. La ventaja de éstos es, que según como ocluyan los dientes superiores con los inferiores, al no cubrir sus superficies, permitirá que acaben de engranar mejor entre ellos.
¿Cuál es el protocolo de visitas finalizada la ortodoncia?
Cuando se acaba el tratamiento de ortodoncia activa se sigue viendo al paciente en revisiones para controles de retención, mantenimiento periodontal y caries.
El mismo día que se descementan los brackets o se eliminan ataches, tomamos registros (fotografías intraorales y extraorales, escáner, radiografías, tac..) y colocamos retenedores fijos.
En unos días o semana se entregan los retenedores dentales removibles que serán de uso completo durante 1 mes. Al mes se vuelve a ver al paciente y, ahí, se indica, normalmente, su uso nocturno de por vida. El paciente tendrá que asistir a revisión a los 3, 6 meses y al año para su mantenimiento dónde se repetirán los registros.