Que la tecnología forma parte de nuestras vidas y que cada vez está más presente en cualquiera de nuestras actividades diarias parece difícil de cuestionar. Pero si hay un ámbito en el que la tecnología ha cobrado especial protagonismo es en la medicina y la atención sanitaria. Grandes avances, nuevas pruebas, menos invasivas, más precisas y más personalizadas. Y esto también ha ocurrido en el sector de la salud dental donde los procesos de digitalización y mínimamente invasivos han cambiado el trabajo del dentista.
En el día a día de los doctores Jaime y David Jiménez de la Clínica CIRO, socios de BQDC, la tecnología sanitaria ocupa un lugar destacado en los distintos tratamientos que llevan a cabo. Con ellos hemos hablado de la cirugía guiada en implantología oral y de odontología estética digital, dos áreas de trabajo que han cambiado la atención al paciente.
“La cirugía guiada es una gran ventaja para el paciente”, explica el doctor Jaime Jiménez, quien cuenta cómo se puede personalizar y planificar lo que sería la boca ideal para el usuario. A través de la cirugía guiada y con la planificación previa “nos permite colocar los implantes en la posición correcta”, comenta el doctor Jiménez, quien recuerda también la importancia de la formación necesaria que debe tener el odontólogo que realiza la cirugía guiada.
Procesos más cortos, en el ámbito clínico y en el laboratorio, más precisos y personalizados son algunos de los elementos que definen la odontología estética digital, así lo cuenta el doctor David Jiménez. Un procedimiento que para los pacientes “es realmente impactante”, porque no es lo mismo ver lo que se va a realizar en la boca sobre un molde y una pasta que verlo sobre un ordenador en una imagen 3D, desde donde los dentistas “podemos verlo y explicarlo al paciente, dando detalles de lo que le sucede, cuál es su problema en la boca y que lo vea en diferentes posiciones”.