Decir que “solo las personas de edad avanzada pueden colocarse implantes dentales” es caer en un mito del todo falso, pero muy extendido en la sociedad. Los implantes dentales son la mejor solución para reemplazar un diente perdido, ya tengas 24, 35 o 68 años.
Sin embargo, tampoco es cierto que todo el mundo pueda llevar implantes dentales. Ser apto para recibir este tratamiento no depende tanto de la edad sino de las condiciones en las que se encuentre tu salud oral. Te contamos qué factores de riesgo existen a la hora de colocarse implantes y cuándo puedes llevarlos sin ningún inconveniente.
La mejor edad para llevar implantes dentales
Los implantes dentales no son como la ortodoncia. Aunque este segundo tratamiento pueden seguirlo tanto niños y adolescentes como adultos, lo ideal es empezarlo cuando antes y corregir los defectos que se manifiesten durante el crecimiento de la mandíbula y el maxilar, en vez de esperar a la edad adulta, ya que el tratamiento entonces puede ser más delicado.
Sin embargo, no existe una edad idónea para colocarse implantes dentales. El único requisito imprescindible respecto a la edad es que el desarrollo facial debe haber finalizado, algo que suele ocurrir en torno a los 17 o 19 años.
Consulta a tu dentista si te falta un diente y deseas reponerlo, pero todavía no has alcanzado la mayoría de edad. En caso de no ser apto todavía para recibir este tratamiento, se podrían encontrar otras alternativas para mantener el espacio de los dientes y evitar que se desarrollen otros problemas de salud oral, hasta que puedas colocarte el implante.
Factores de riesgo en la colocación de implantes
El tratamiento con implantes se desaconseja tan solo en unos pocos casos: si se sufre alguna patología oral o enfermedad grave, o si se consumen habitualmente algunos medicamentos concretos. El médico y el dentista que se encarguen de revisar el estado de salud del paciente deben advertirle de las complicaciones que podrían surgir en estos casos.
Estos son algunos de los factores de riesgo que deben valorarse antes de iniciar el tratamiento:
- Tener escasez de hueso mandibular o maxilar, ya sea debido a una higiene oral deficiente, por padecer osteoporosis o una enfermedad periodontal, o por encontrarse en una edad muy avanzada.
- Padecer alguna enfermedad sistémica (ej: diabetes, cardiopatías, hipertiroidismo…).
- Seguir un tratamiento de radioterapia.
- Haber sufrido recientemente un ataque al corazón o tener problemas cardiovasculares.
- También se desaconseja colocarse implantes dentales durante el embarazo, por los efectos adversos que pudieran provocar la prescripción de determinados antibióticos, habituales durante este periodo
En el caso de padecer alguna enfermedad sistémica, se podrían colocar implantes dentales sin problemas siempre y cuando esta se encuentre controlada. Para los pacientes con deficiencia ósea se podría contemplar un tratamiento previo de regeneración ósea que mejore las condiciones bucodentales.
¿Todavía tienes dudas sobre si serías apto para colocarte un implante dental? Consulta con tu clínica de BQDC más cercana y te informarán.