Os dejamos el artículo publicado en El País el pasado 26 de abril de 2014 con opiniones del Doctor Blas Noguerol, de la Clínica Dental Noguerol y el Doctor Alcaraz de la Clínica Dental Alcaraz.
Hasta un 40% de embarazadas con inflamación previa tendrá problemas de encías.
La periodontitis no tratada supone un riesgo tres veces superior de tener un parto prematuro o un bebé con bajo peso inicial.
Con la gestación se producen una serie de cambios hormonales que afectan a los vasos sanguíneos de las encías y propician las inflamación y el sangrando gingival. Pese a todo, algunos estudios actuales muestran que menos del 1% de las mujeres desarrollan gingitivits si antes de quedarse embarazada su salud gingival era buena. En cambio, si la inflamación de las encías ya estaba presente antes de la gestación la gingitivits se produce del 36 al 100% de los casos. Este fenónomeno está ligado a la liberación de sustancias oxitócitas, que actúan en la maduración cervical como inductoras de contracciones uterinas. El parto pretérmino es una de las consecuencias más relevantes de la mala salud bucal durante el embarazo. «Las embarazadas con periodontitis presentan un riesgo tres veces superior de tener un parto prematuro y/o un bebe con bajo peso que las que no tienen problemas de encías» afirma el especialista Blas Noguerol, director de la Clínica Dental en Granada que lleva su apellido.
Entre tres y cuatro mujeres de cada diez tendrá alguna complicación de la encía asociada al embarazo, especialmente gingivitis . La pérdida de hueso y caída de dientes, es decir, la periodontitis, es una enfermedad menos común pero que también puede desarrollarse durante la gestación, sobre todo si la mujer ya presentaba gingivitis previamente al embarazo. No obstante, los especialistas recuerdan que es muy importante la condición previa. “Se ha demostrado que si no hay bacterias, por muchas hormonas que haya en el embarazo, nunca habrá gingivitis durante éste”, señala Noguerol. Por este motivo, Jaime Alcaraz, especialista en periodoncia e implantes de la Clínica Dental de Alicante Alcaraz, añade: “Lo mejor siempre será la prevención y que cuando la mujer tenga intención de quedarse embarazada acuda al dentista para hacerse una revisión».
En las primeras etapas del embarazo se produce un aumento de estrógenos y posteriormente, cuando la placenta está bien constituida, se produce de la progesterona. Éstas, a su vez, tienen una tendencia a producir un aumento de la vascularización y, por lo tanto, tienden a favorecer una cierta lesión del endotelio vascular. “La lesión del endotelio junto al aumento de la vascularización impulsan la producción del cuadro inflamatorio de la encía”, apunta el especialista Blas Noguerol. El aumento de las prostaglandinas, inductoras de las contracciones uterinas, hace que los partos prematuros o bebes de bajo peso sea el principal riesgo de la inflamación de la encía.
“Siempre ha habido un mito negativo respecto al tratamiento durante el embarazo, pero la realidad es que siempre que se pueda debe tratarse”, afirma el especialista Jaime Alcaraz. La gingivitis suele tratarse con higienes bucales e instrucciones de higiene oral, mientras que en la periodontitis suele realizarse, además, raspado y alisado radicular. Solamente en ciertos casos se requiere hacer cirugías periodontales durante el embarazo.“Pero es aconsejable posponer las cirugías al nacimiento del bebé, siempre y cuando no sean urgente”, matiza Alcaraz.
El motivo principal es debido a la medicación que se debe administrar después de la cirugía y los posibles efectos secundarios de los antibióticos. “Lo ideal siempre será que la mujer visite a su dentista antes de quedarse embarazada, porque si no hay problema de base, el riesgo de que aparezca durante el embarazo es mínimo”, concluye Jaime Alcaraz.