Según un estudio publicado en una Universidad de EE.UU, las personas que tenían una sonrisa bonita eran más felices y positivas que aquellas que tenían problemas al sonreir.
Hoy en día, donde la publicidad nos desborda por televisión, Internet, etc, estamos acostumbrados a observar personas con dentaduras perfectas. Dientes perfectamente alineados, blancos y con la forma y tamaño adecuados.
Gracias a los avances constantes en materiales y técnicas podemos optar por un gran número de posibilidades si queremos aspirar a tener una sonrisa de anuncio. Ortodoncia invisible, carillas estéticas de composite o cerámica, implantes… son algunos de los tratamientos a los que podemos optar para obtener nuestro deseo de tener una bonita sonrisa.
El estudio del paciente por parte del profesional es fundamental para encontrar el tratamiento que más se adecúe a sus necesidades. Dicho estudio puede incluir fotografías, radiografías, modelos de estudio, etc.
En definitiva, se busca llegar a una solución satisfactoria para ayudarnos a ser un poco más felices.