La malposición dental es un problema que sucede en la boca por varias razones. Lo cierto es que esta dolencia va mucho más allá de un problema estético porque genera además un problema de salud: es pierde la capacidad correcta de masticación y por tanto se sobre carga el sistema digestivo. Además los dientes mal alineados y apiñados son difíciles de mantener limpios y en buenas condiciones. Esta mala higiene bucal puede causar caries, empeorar la enfermedad de las encías e incluso llegar a provocar la pérdida de los dientes.
Por tanto la corrección mediante una ortodoncia se hace necesaria. Existen varios tipos ortodoncias que pueden ser utilizadas para corregir la posición de los dientes.
¿Por qué existe la malposición dental?
El tamaño de los maxilares es más pequeño por falta de uso, lo que provoca la falta de espacio para todos los dientes (especialmente los terceros molares o muelas del juicio, que tantos problemas y molestias producen, obligando a su extracción en numerosos casos). Los dientes se apiñan y quedan mal colocados y mal alineados.
¿Qué tipos de ortodoncia existen?
Existen varios tipos de ortodoncia y su odontólogo le recomendará una u otra en relación a su necesidad y problemática (más información)
- Ortodoncia tradicional: es la que se compone de elementos metálicos (brackets). En la ortodoncia tradicional los aparatos se ubican por el lado externo de los dientes siendo visibles durante todo el tratamiento hasta su retiro, cuando el proceso ha concluido.
- Ortodoncia estética: es muy similar a la ortodoncia tradicional pero los alambres son transparentes y por tanto cuestan más de ver que en las ortodoncias tradicionales. El material suele ser cerámico o zafiro, las funciones que cumplen son iguales a la de las ortodoncias tradicionales. La elección del tipo de tratamiento va a depender del deseo de llevar adelante un tratamiento de ortodoncia «menos visible» desde el exterior.
- Ortodoncia invisible o Invisaling: este es un sistema nuevo que permite alinear los dientes sin tener que llevar brackets. Funciona con unos aligners que permiten alinear los dientes de forma que los demás no lo noten. Estos aligners son transparentes y removibles por el mismo paciente, haciendo más sencilla la higiene dental diaria así como la ingesta de comida. Estas piezas se van ajustando y cambiando cada quince días para poder ir recolocando las piezas dentales.