Síntomas del bruxismo y su efecto en el día a día

Síntomas del bruxismo y su efecto en el día a día

Parpadear, tragar saliva e incluso respirar, son procesos de nuestro cuerpo que realizamos de forma natural y casi inconsciente hasta que alguien nos los menciona. Nuestro sistema nervioso ajusta la frecuencia con la que realizamos estas acciones de forma automática para mantener constantes las funciones vitales.

El hábito de rechinar los dientes (bruxismo) también es involuntario e inconsciente, pero las causas de esta patología son psicológicas, ambientales y circunstanciales, no una simple consecuencia de la regulación automática de nuestro cuerpo. Por ello, es importante conocer sus síntomas y los factores que favorecen su origen para evitarlos y que nuestra salud no se vea afectada.

¿Cómo puedo saber si tengo bruxismo?

El bruxismo y las apneas, así como otras patologías dentales, tienen en común que muchas veces pasan desapercibidas hasta que realizamos una visita al dentista y nos informan de su presencia, o leemos casualmente sobre los síntomas en algún artículo.

¿Cuántas veces te has levantado por la mañana con dolor de cabeza, sensación de cansancio o con molestias en la boca? Cuando esto ocurre, muchas veces atribuimos los dolores a una mala noche; pero si la sensación es recurrente, es muy probable que tengas bruxismo.

Concretamente, el bruxismo es una disfunción de la articulación temporomandibular o ATM (el conjunto de músculos y estructuras que unen la mandíbula al cráneo). Cuando la ATM se lesiona provoca el chirrío inconsciente de los dientes, generalmente mientras dormimos, lo que conlleva dolor mandibular, desgaste de las piezas, dolor de cabeza e incluso insomnio, por la mala calidad del sueño.

Si percibes alguno de estos síntomas, acude al dentista para que diagnostique esta patología y pueda ponerle solución. Muchas personas no nacen con bruxismo, sino que lo desarrollan a raíz de las circunstancias de su día a día.

Causas del bruxismo y cómo tratarlo

Está demostrado que una de las principales causas del bruxismo es la acumulación de estrés y ansiedad. Cuando nos estresamos, todo nuestro cuerpo se tensa, incluidos los músculos de la ATM. Esto favorece la rigidez de la mandíbula y ese roce constante de las arcadas dentarias. Los dientes establecen contacto entre sí y la tensión provoca que unas piezas friccionen contra otras y se desgasten.

Otras de las causas que favorecen el bruxismo son: una mala oclusión dental, la asimetría de las estructuras dentarias, padecer otros trastornos o alteraciones de la ATM, o incluso la alimentación y la postura.

El tratamiento más eficaz para el bruxismo consiste en llevar unas férulas de descarga mientras dormimos, para evitar que los dientes rechinen cuando entran en contacto. No obstante, si las causas son ambientales, otra forma de controlarlo es intentar llevar un ritmo de vida más tranquilo, o incluso acudir a profesionales que nos ayuden a reducir los niveles de estrés.

Realiza tu consulta en tu clínica de BQDC más cercana para que nuestros profesionales puedan valorar el estado de tu salud y comprobar si padeces bruxismo para ponerle solución.

 

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