¿Sangras cuando te cepillas los dientes? Aunque esto puede suceder también como consecuencia de un cepillado muy agresivo, el sangrado de las encías suele ser síntoma de una enfermedad periodontal.
¡No te asustes! Si la tratas a tiempo, esta condición no tiene grandes riesgos para tu salud. Sin embargo, si dejas que evolucione, puede convertirse en un problema más grave que te haga perder piezas dentales y estropee tu sonrisa.
Te explicamos qué factores propician su aparición para que puedas prevenirla y cómo se puede curar para volver a disfrutar de unas encías y dientes sanos.
¿Cuáles son las causas de la aparición de enfermedades periodontales?
El sangrado de las encías cuando se tiene una enfermedad periodontal se produce por la acumulación de bacterias en la boca que no se han eliminado por completo con la higiene dental diaria.
Estas bacterias pueden llegar de distintas formas: por los alimentos que consumimos, modernos las uñas, los ácidos de los azúcares, etc. Esta es una condición bastante habitualy, lo que recomiendan los dentistas, es es tener una buena rutina de higiene dental para evitar su acumulación excesiva.
Por tanto, tener una higiene dental deficiente es una de las causas principales de la aparición de la gingivitis o periodontitis, que también tiene como consecuencia la halitosis o mal aliento. Sin embargo, hay otros aspectos que pueden favorecer la acumulación de bacterias:
- La sequedad bucal. La saliva protege nuestros dientes y encías. Si debido a una hidratación insuficiente o alguna enfermedad crónica, no producimos suficiente saliva, puede que nuestra boca no cuente con la protección necesaria para defenderse de los ataques de las bacterias.
- Tener los dientes mal alineados. Las bacterias se adhieren a los tejidos gingivales y en cualquier hueco que encuentren entre los dientes. Si estos están mal alineados, les resultará más sencillo encontrar un lugar en el que adherirse.
Además, en fases más avanzadas, la enfermedad periodontal puede causar el desplazamiento de las piezas dentales (migración patológica de los dientes), con lo que hay que tener especial cuidado. El dentista determinará si es necesario combinar el tratamiento de la enfermedad periodontal con una ortodoncia.
- El estrés y la ansiedad. Algunos estudios afirman que el cortisol, la hormona que libera nuestro cuerpo cuando nos estresamos, puede tener relación con el desarrollo de enfermedades periodontales.
- El tabaco. No solo esta sustancia nociva puede ser causante de la enfermedad, sino que además consigue que sea más difícil detectarla. Además, el tabaquismo puede llegar a ser el responsable de otras muchas afecciones en nuestra boca, entre ellas el cáncer oral.
- La diabetes, alguna otra enfermedad crónica o el consumo de determinados medicamentos. Consulta siempre a tu médico de cabecera si tienes alguna condición especial o sobre los efectos de cualquier fármaco que te receten.
¿Cómo se cura la gingivitis? ¿Es doloroso tratar la periodontitis?
La forma más eficaz de prevenir las enfermedades periodontales es tener una higiene dental adecuada. Si a pesar de esto tienes problemas en tus encías, puedes tratar la gingivitis mediante una tartrectomía o limpieza dental profesional. A través de distintas herramientas, en función de la tecnología empleada por la clínica dental, el profesional elimina el sarro acumulado y calcificado para dejar una sonrisa radiante y sana.
En el caso de la periodontitis, la enfermedad periodontal se encuentra en un estado más avanzado y será necesario realizar una periodoncia. Este tratamiento está enfocado a eliminar la placa acumulada, pero además se sanan los tejidos afectados y se frena el avance de la enfermedad para evitar la pérdida de piezas dentales.
Si sufrir una enfermedad periodontal ha perjudicado la estética de la sonrisa de alguna forma (se ha retraído la encía, se ha desplazado el margen gingival…) también puedes recurrir a un alargamiento coronario o la realización de un injerto de encía, de forma complementaria a la periodoncia. Con estos tratamientos, además de mejorar la armonía a tu sonrisa, devuelves tejido a la encía, necesario para que proteja y sostenga tus dientes.
Realiza tu consulta en tu clínica de BQDC más cercana si te sangran las encías y quieres ponerle remedio.